domingo, 26 de febrero de 2012

BRÓCOLI CON SALSA BECHAMEL


Hice esta misma receta dos veces, probando algunas variantes con pequeños cambios. Esta receta es muy fácil, lo único más trabajoso es preparar la salsa bechamel, así que lo mejor es tenerla preparada con antelación y así ya sólo nos queda cocer el brócoli y montar. Se puede presentar tanto en un almuerzo como en la cena.


Variante 1:
INGREDIENTES:
-Un brócoli.
-Unas cucharadas de salsa de tomate frito
-Una buena cantidad de salsa bechamel.
-Un buen puñado de queso rallado.


MODO DE HACERLO:
1.Preparar la salsa bechamel. Yo la hice como de costumbre (tengo la receta puesta en el mes de diciembre pasado).
2.Preparar el brócoli. Se corta la parte más extrema del tallo, que es la más dura, pero sin separarlo aún en "arbolitos". Así con todo el brócoli entero se lava bajo el grifo con un chorrito suave de agua. Una vez lavado se separa en unos cuantos "arbolitos", yo lo separé en pocos, como en unos cuatro, por miedo a que si lo separaba en trozos más pequeños quedará muy deshecho.
3.Cocer el brócoli. Igualmente para que no se deshaga todo, se ha de hervir con poca agua (el agua ha de cubrir como hasta la mitad de los arbolitos). Así, ponemos una olla grande y mejor si es alta para que al taparlo haga un efecto de vapor, para que el brócoli se cueza medio con el agua, medio con el vapor. Cuando el agua ya esté hirviendo se echa el brócoli dejando los tallos en el suelo de la olla y la copa del arbolito arriba. Se tapa y se deja hervir a fuego suave. Respecto al tiempo, en esta primera vez lo dejé más tiempo, casi 20 minutos y en mi vitro que es lenta, así que en otro fuego, con menos tiempo ya estará blando. Así que se quedó más blando, menos "al dente", pero a mí me gustó más, eso sí, a la hora de manipularlo hay que tener más cuidado para que no se deshaga más aún.
4.Montar la fuente, para meter en el horno, del siguiente modo:
-El tomate frito extenderlo por todo el fondo.
-Poner con cuidado encima el brócoli, encima del mismo la salsa bechamel y por último el queso rallado. 
5.Meter en el horno hasta que el queso rallado se haya fundido con la bechamel. Si nos gusta tostado por arriba pues dejarlo hasta que así se gratine, controlando que no se queme. Yo lo tuve a 180 grados como unos 20 minutos y con las dos resistencias para que el tomate del suelo de la fuente también se calentara.
Recién sacado del horno así quedó. Vista general de la fuente:

Aquí detalle de las esquinas:

Y las esquinas del otro lado:

Aquí ya lo corté y se ve con todo el jugito y el brócoli blandito:

  En la segunda vez que hice la receta, ya le hice fotos paso a paso. La hice igual sólo que el brócoli probé a dejarlo más "al dente", más entero, rebajándole el tiempo de cocción (lo dejé unos minutos menos en la olla). Y además, probé a hacerlo con tomate triturado que viene solo el tomate natural sin freir y lo puse con una capa de aceite en la fuente para que así aceite y tomate se mezclaran en el horno.

Aquí vemos el brócoli entero, tal y como lo compré en la frutería:

Ya limpito y cortado en unos cuatro trozos:

Colocado en la olla y después tapado:


Haciéndose en la olla, con el agua hirviendo:



Lo sacamos con cuidado y lo reservamos:



Montamos la fuente, poniendo primero una capa de aceite (no mucho) y a continuación el tomate triturado:


Colocamos encima los trozos de brócoli:


Cubrimos con la salsa bechamel:


Espolvoreamos con un buen puñado de queso rallado para después meterlo en el horno hasta que el queso se funda y comience a dorarse:


Una vez horneado así quedó:


Aquí ya vemos la ración en el plato (se sirve recién hecho, calentito) y a degustar, ñam, ñam!!:

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